Defensores de migrantes en Estados Unidos, contra la Reforma Migratoria

Voluntarios

En algún punto del desierto cerca de Jacumba, CA. los voluntarios llevan agua a los migrantes que tratan de cruzar ilegalmente a USA.

La Reforma Migratoria próxima a debatirse en el Congreso norteamericano amenaza con no cumplir las exigencias de colectivos y asociaciones de derechos por los migrantes. Algunas encuestas reflejan la creciente negativa del voto latino para la aprobación de un texto que ha sufrido importantes cambios en su esencia fruto de las presiones del partido republicano en el senado estadounidense, y hay quienes ya han alzado su voz en contra. Pese a que la Reforma ha ganado especial importancia en la agenda política y mediática del país, las grandes expectativas por una nueva era de integración y respeto se han desvanecido tras el anuncio de la posible militarización de la frontera y el aumento de la seguridad con la inversión de hasta 50,000 millones de dólares. Entre las medidas para lograrlo estarían, entre otras, la duplicación de los agentes de la patrulla fronteriza y la construcción de otras 700 millas de valla, lo que se traduciría en más muertes de migrantes que traten de cruzar ilegalmente.

Trabajadores inmigrados, organizaciones y activistas coinciden en que la Reforma no solo es necesaria; urge. En estos años de gobierno demócrata, han sido deportadas más personas que en ninguna administración anterior (Barack Obama es denominado entre migrantes y defensores de los Derechos Humanos como el “deporter-in-chief”). Más de 11 millones de personas se beneficiarían de una regularización que significaría el final del apartheid al que están sometidos principalmente los trabajadores latinos, así como también los padres y familiares directos de los denominados “Dreamers”. Estos norteamericanos de segunda, que crecieron en Estados Unidos y que continúan viviendo bajo el estatus de ilegales, ya han recibido el aviso del presidente de la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes, el republicano Bob Goodlatte, de que no apoyarán la legalización de la situación de sus padres. El Congreso está representado por una mayoría republicana y las organizaciones temen que si la Reforma no consigue tramitarse antes de noviembre, ya no logrará aprobarse porque el próximo año se celebrarán elecciones para la Cámara Alta “y nadie querrá tocar el tema”.

Enrique Morones

Enrique Morones, presidente y fundador de Border Angels

Enrique Morones, presidente y fundador de la ONG californiana Border Angels (Ángeles de la Frontera) desde 1986, está en contra de la Reforma. Desde esta entidad sin ánimo de lucro, una de las más destacadas organizaciones pro-derechos de los migrantes en Estados Unidos, viene realizando campañas solidarias y de concientización en los dos países y ha promovido diversas marchas reclamando justicia y reformas legislativas dirigidas a Washington. “La Reforma está politizada. La idea era que los 14 millones de personas fueran documentadas, pero se ha ido cediendo demasiado a este objetivo primordial, y además se pretenden duplicar los agentes de la migra y la longitud de la valla. Esto solo va a provocar más muertes. Los tiempos de sacrificios aztecas ya pasaron, y esta reforma se va a hacer sacrificando vidas humanas”. En su trayectoria como defensor de los migrantes, Morones (nacido en San Diego de padres mexicanos), ha enfrentado a políticos, periodistas y temibles movimientos caza-migrantes como los Minutemen, lo que le ha valido tanto amenazas como reconocimientos (en 2009 le fue otorgado el Premio Nacional de Derechos Humanos de México). En 1998, el presidente Ernesto Zedillo le concedió la ciudadanía mexicana, convirtiéndose en la primera persona en tener la doble nacionalidad México-estadounidense.

Además del trabajo diario de asesoramiento y apoyo a los migrantes, los voluntarios realizan una gran labor acudiendo con asiduidad a entregar agua, ropa y alimentos a los migrantes que cruzan el desierto. En Border Angels están directamente involucrados con los problemas de las personas que viven indocumentadas en el país más rico del mundo. “Cuando alguien solo habla de cifras de personas muertas no ven a la madre que llora porque perdió a su hija, o los cadáveres que recogemos en el desierto”. Morones se queja de que desde Washington solo se presenten informes referentes al aumento de personas que emigran desde el sur y su situación irregular en el país. Reclama un análisis verdaderamente importante: el que ponga de manifiesto el número de muertos por cada milla de valla construida para poder decidir si la reforma que implica duplicar su extensión será una decisión acertada.“No queremos más migra. ¿Por qué no utilizar ese dinero para, en vez de contratar el doble de agentes, entrenar y profesionalizar a los que ya hay? La patrulla fronteriza es la autoridad policiaca con menos preparación y entrenamiento de los Estados Unidos, y esto se refleja en los problemas de corrupción y asesinatos que se registran”.

borderpatrol Una de las industrias más importantes de California es la agricultura, y aproximadamente el 75% de los trabajadores (unos 3 millones) son indocumentados. “Queremos realizar la reforma migratoria de manera integral, que tenga en cuenta el gran peso de la población migrante en Estados como éste”. Sin embargo, la aprobación de una reforma integral como la que reclama Enrique Morones tiene un gran frente al que derrotar, un problema de trasfondo latente en la sociedad estadounidense y que, pese a contemplarlo, es omitido voluntariamente en los debates: el racismo. El conservadurismo norteamericano, abanderado por el Partido Republicano, y concretamente por gobernadores y funcionarios de Estados como Arizona o Texas, difícilmente aceptará la aprobación de políticas excesivamente aperturistas hacia la integración de la comunidad migrante en la sociedad mediante regularizaciones y amnistías, y utilizarán este tipo de dogmas contra la Reforma. “Alegan que no quieren otorgar la ciudadanía a los migrantes. Qué bueno, porque ellos tampoco lo quieren. Lo que quieren es dejar de ser indocumentados, que es una diferencia muy grande. Amenazan con investigarlos por si tienen antecedentes criminales; no hay problema, la gran mayoría no tienen. Además nosotros entendemos que para regularizar su situación deban pagar un impuesto o multa al gobierno, y consideramos que esto es mejor a que paguen a un pollero que los estafe o abandone en medio del desierto”. Morones ha hecho frente al racismo en varias ocasiones. La más sonada fue cuando encabezó una campaña en contra del polémico presentador Lou Dobbs, que lanzaba continuos ataques racistas a la comunidad latina desde su programa “Broken Borders”, y que finalmente acabó siendo despedido.mensaje

Deja un comentario